Hace una semana, me comentaba un cliente y amigo, “ ¿no me digas que han quitado el Impuesto del Patrimonio que llevaba un montón de años declarando, y que me molestaba muchísimo pagar porque era tremendamente injusto?” (realmente me lo dijo en otros términos irreproducibles), y yo le conteste: “no, pero si”. Sigue leyendo