Feliz Navidad 2015 y próspero año 2016

Que rápido pasa el tiempo. Ya volvemos a estar en un periodo donde todos los buenos recuerdos nos vienen a la cabeza, y donde queremos olvidar algunas malas experiencias. Aunque los tiempos siguen siendo muy complicados, si nos ponemos a pensar, seguro que en número los primeros superan con creces a las segundas. En cualquier caso, es con lo que nos tenemos que quedar, lo positivo se debe cuidar y hacer crecer, y de lo negativo aprender para evitarlo en un futuro y después olvidarlo lo antes posible. Los recuerdos son pasado, nada más, pero nos ayudan a mejorar el futuro.

Vivimos una época con un ritmo de vida trepidante, todo va muy deprisa, también lo que pasa alrededor de nuestra actividad empresarial, profesional o laboral. Nosotros no nos podemos permitir las frivolidades de algunos mandatarios que no se juegan nada con sus decisiones. Nosotros tenemos que tener los pies en el suelo siempre, tenemos que trabajar duro y con conocimiento, tenemos que gestionar recursos escasos, y nos tenemos que adaptar a diario al medio mutante donde nos ha tocado vivir. Nos nos queda otra, pero cada día damos gracias a poder hacerlo.

Aunque muchas veces no nos damos cuenta, somos unos afortunados los que podemos crear riqueza y bienestar con nuestro trabajo. Tenemos una responsabilidad muy grande los que cada día ponemos grasa a la compleja maquinaria económica, para que ésta no se oxide, se rompa y se acabe parando. Por tanto, también tenemos el derecho y la obligación de reclamar que se administre bien todo lo que cuesta tanto de generar. Sed exigentes con todo lo que hacéis, y con lo que os hacen, es la única manera de mejorar y avanzar. La autocomplacencia y la mediocridad no lleva a ninguna parte.

Llegados aquí sólo podemos repetir, una vez más, el agradecimiento por seguir confiando en nosotros. Muchas gracias también por ser exigentes con lo que nosotros hacemos, y sobre todo, para seguir luchando, desde la posición de cada uno, por su empresa, que es lo mismo que lidiar por su familia, por sus amigos o por su país. Esperamos de todo corazón que, una vez terminadas los Navidades, entremos en un nuevo ejercicio, lleno de buenas intenciones y muchos cambios. Esperamos que todos sean para bien, y que podamos celebrarlo juntos dentro de un año. Seguro que será así.