Plan Anual de control tributario y aduanero de 2020.

Recientemente se ha publicado la Resolución de 21 de Enero de 2020, de la Dirección General de la Agencia Estatal de Administración Tributaria, por la que se aprueban las directrices generales del PLAN ANUAL DE CONTROL TRIBUTARIO Y ADUANERO de 2020.

Entre las citadas directrices destacaremos las siguientes, por lo que se refiere a lo que se avecina en cuanto a Información y Asistencia por parte de la Agencia Tributaria, que pretende mejorar el control directo con sistemas de ayuda telemática, que le permiten las nuevas tecnologías (y que traducido es la captación de información automática):

  • Se incidirá en la creación de las denominadas «Administraciones de Asistencia Digital Integral» (ADI’s). Que vendrán a ser robots virtuales de información (algo parecido, guardando las distancias, pero con los mismos objetivos, a lo que ya existe en muchas páginas web en las que aparece un emoticono que nos “ayuda a comprar”.
  • Se pretende mejorar el localizador de entregas de bienes y de prestaciones de servicios. Para facilitar la ayuda a definir donde se considera realizada una determinada operación económica internacional en cuanto al IVA (algo que en la práctica no es nada fácil y que conlleva muchos problemas de interpretación, veremos si realmente funciona).
  • El calificador inmobiliario: mediante la incorporación de información procedente de las distintas CCAA en relación con el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales. Esteremos a la expectativa de cómo colaboran estas administraciones entre sí, cuestión que ahora es una utopía, más por problemas políticos que prácticos.
  • La ayuda a la confección del modelo 303 para arrendadores (¡cuidado con la palabra “ayuda”!, siempre que venga de la Agencia Tributaria).
  • La calculadora de plazos de modificación de bases imponibles y otras rectificaciones. En el supuesto que esto llegue a funcionar bien, debería permitir mejorar la seguridad jurídica en cualquier modificación de operaciones, que ahora en la práctica conlleva casi siempre una sanción o recargo.
  • La calculadora de plazos del Sistema Inmediato de Información (SII). Importante tener estos temas claros, ya que los automatismos del SII tienen consecuencias imprevisibles.
  • Asistente virtual del SII. ¡ Más emoticonos !
  • Asistente virtual de IVA (AVIVA). En fin, es el fin de la relación humana con Hacienda.
  • Desarrollo de herramientas complementarias adicionales (p.ej. calculadora de prorratas). Repito, la AEAT pretende llegar a un nivel de automatismos y control total, con trazabilidad absoluta sobre toda la información (es lo que ahora se llama Big Data, ¿les suena la palabreja?).
  • Diseño y desarrollo del denominado «Asistente censal». Esto va a ser muy peligroso, puesto que una de las decisiones más importantes de todo empresario o profesional que empieza es crearse un buen perfil censal (vamos como el de Facebook, pero con Hacienda, entiendo que ya saben que esta red social sabe más de usted que usted mismo).
  • Consolidación de la aplicación móvil «Agencia Tributaria» que ofrece servicios personalizados a los contribuyentes, como canal de relación con los mismos para el conocimiento y cumplimiento de sus obligaciones fiscales.
  • En la campaña del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas del ejercicio 2019, se continuará avanzando en el servicio de Renta WEB. Se potenciarán los avisos en el documento de datos fiscales del IRPF de todas aquellas fuentes de renta tanto internas como internacionales de que se tenga conocimiento (control!, control!, control!, …).
  • También pretenden consolidar las herramientas de análisis y control de las solicitudes de rectificación de autoliquidaciones. Esperemos que conlleve también la rebaja de sanciones o recargos, muchos de ellos actualmente absurdos y con finalidad recaudatoria.
  • Avanzar en la puesta a disposición de los datos fiscales al contribuyente, introduciéndolo como novedad en el Impuesto de Sociedades. Como el “borrador de IRPF”, pero en IS.
  • Se pondrá a disposición de determinados contribuyentes los denominados «Libros agregados (LLAA)», llevados a través de la Sede electrónica de la AEAT.

En definitiva, la estrategia de la Agencia Tributaria va claramente dirigida a la utilización de nuevas herramientas y sistemas de asistencia dirigidos cada vez más a la mejora del cumplimiento de las obligaciones tributarias en período voluntario, con captación automática de información, con el fin de promover un ensanchamiento de las bases imponibles declaradas. Es decir, facilitar la entrada de datos, para controlar de más cerca y antes al contribuyente, para que pague más (no nos engañemos, las ayudas no son gratis, y Facebook tampoco).